Cuenca / Agnani 12‑08‑1377
Se le conoce con el tratamiento de Micer Gómez García de Albornoz. Hijo de Alvar García de Albornoz y sobrino del cardenal Gil Álvarez de Albornoz, a quien ayudó en la serie de guerras que llevó a cabo en Italia para recuperar el patrimonio del papado, destacando como capitán de las tropas pontificias. Fue nombrado gobernador de Bolonia y como premio a esa destacada labor fue senador de Roma. La reina Juana de Nápoles le encargó el mando de su propio ejército y, como embajador de esta corte, visitó al papa en su exilio de Aviñón (1366) para informarle de la situación en Italia e intentar convencerlo de que volviese a ocupar su sitio en Roma. Como VII señor de Albornoz, hizo efectiva la posesión del señorío de Moya que Enrique II había donado a su padre, Alvar García de Albornoz, pero la resistencia de los moyanos a aceptar el señorío impuesto obligó a la corona a exigir a los procuradores del territorio, en las Cortes de Soria (1375) que rindieran homenaje de pleitesía a Micer Gómez. De esta forma, la comarca moyana, hasta entonces tierra fronteriza, enraiza definitivamente en Cuenca y en Castilla. Ocupó también el Infantado, comprado por su padre en 1371, ayudando así a definir los límites conquenses en la zona alcarreña regada por el Guadiela. En cédula real de 23 de junio de 1374 se ordenó a todos los habitantes de ambos territorios que obedecieran a Micer Gómez y a su mujer, Constanza Manuel, señora del Infantado. Fue sepultado en el convento de Santa Clara, de Alcocer.
Referencias: José María Álvarez Martínez del Peral, “Conquenses ilustres”. El Día de Cuenca, 02-10-1926.