Alcañiz García, Florentino

Torrubia del Castillo, 14-03-1893 / Lima, Perú, 13-08-1981

Jesuita y misionero en América, fundador de tres congregaciones religiosas, las Misioneras Hijas del Corazón de Jesús, las Celadoras del Sagrado Corazón y los Cartujos del Padre Celestial que recurrió con profusión a los libros para difundir su pensamiento doctrinal.

Nació en el seno de una familia campesina, propietaria de un molino que se alimentaba de las aguas del Júcar. La vocación religiosa le llegó muy pronto, y tras un amago de ingresar en los cartujos, cambió esa inclinación contemplativa por la vida activa, ingresando en la Compañía de Jesús, en el noviciado de Granada, el 12-10-1908. Tras el primer periodo formativo fue enviado a Roma para ampliar estudios, doctorándose en Filosofía por la Universidad Gregoriana, con una tesis titulada De autógrafo Tractatus inediti Card Ioannis de Lugo “De Anima”. Casi de inmediato publica la que probablemente es su obra intelectualmente más importante, aunque no la más popular, Ecclesia patrística et millenarismus (La Iglesia Patrística y el Milenarismo”, considerada clave en cuestiones escatológicas. Ordenado sacerdote pasó a ejercer tareas docentes en Granada, hasta que en 1932 la Compañía de Jesús fue expulsada de España, marchando entonces a Cerdeña y Bélgica. En ese trance vital experimentó un cambio de orientación que le llevó a asumir como propia una de las ideas esenciales de los jesuitas, la devoción al Sagrado Corazón de Jesús, que a partir de ese momento desarrolló en varios libros, especialmente en La Devoción al Corazón de Jesús, considerado por la crítica católica, una de las mejores exposiciones históricas y ascéticas que se haya escrito en español sobre el tema y del que se han hecho innumerables ediciones.

Cuando terminó la guerra en España, regresó a Granada, y fue profesor de la Facultad de Teología. Allí conoció a Carmen Méndez, con quien fundó la congregación de las Misioneras Hijas del Corazón de Jesús (1942)  y a continuación colaboró con Amadora Gómez en la fundación de la Congregación de las Celadoras del Reinado del Corazón de Jesús (1949), cuya aprobación canónica fue firmada por el obispo de Cuenca, Inocencio Rodríguez Diez.

Ese mismo año solicitó ser enviado a América como misionero, radicándose en Perú, desde donde actuó en tareas misionales en Ecuador, Colombia y Bolivia, desarrollando una activísima labor de propagación de la fe cristiana, contando con el auxilio de una envidiable capacidad oratoria, tarea que completó estableciendo asentamientos de las comunidades que había fundado.

La actividad misionera y pedagógica no le impidió seguir avanzando en el conocimiento de los matices más oscuros de la religión, ofreciendo interpretaciones que en algún momento llegaron a rozar la ortodoxia. Atraído por el fenómeno de las apariciones marianas, llegó incluso a mostrar simpatía por las apariciones de El Palmar de Troya, aunque luego se retractó. Profundizo en la mariología y continuó con sus investigaciones escatológicas que llegó a concretar en un compendio comentado (inédito) de La Venida del Mesías en gloria y majestad, conocida y controvertida obra que el ex jesuita chileno Manuel Lacunza publicó, a principios del siglo XIX, bajo el seudónimo de Juan Josafat Ben Ezra y en la que defiende abiertamente el milenarismo. En ese camino, en el tramo final de su vida volvió a la misa tradicional latina.

Un grave accidente acabó de manera brusca con su apostolado misionero y fue destinado al Colegio de la Inmaculada de Monterrico, en Lima, compartiendo actividad con la Parroquia de Nuestra Señora de Fátima en Miraflores (Lima), periodo en el que quiso fundar una nueva congregación, los Cartujos del Padre Celestial, que no prosperó. El 13 de agosto de 1981, se sintió repentinamente indispuesto y, tras breve agonía, murió con fama de santidad, a la edad de ochenta y ocho años.

Como publicista, el padre Alcañiz fue singularmente fecundo en obras, en especial en una serie de libros divulgativos bajo el título de “Destellos bíblicos”, dedicados a comentar cuestiones esenciales de la religión, lo que hace con un lenguaje extremadamente sencillo asequible a todo tipo de lectores. A ellos se une la también amplia serie de volúmenes dedicados a encomiar la devoción al Sagrado Corazón de Jesús, de los que se han hecho innumerables ediciones.

Obra publicada

            Predilección del Corazón de Jesús por los Apóstoles (Granada, 1931)

El reinado del Sagrado Corazón, ideal de la juventud (Granada, 1931)

            La infancia de Cristo (Granada, 1932), en colab. Con Manuel Cabrera.

            Poesías al Corazón de Jesús (Granada, 1932).

            Ecclesia Patristica et Millenarismus. Expositio historia (Granada, 1933).

            Parábolas: desenvolvimiento del Reino de Dios (Granada, 1934)

            Parábolas: el Reino de Dios e Israel (Granada, 1934).

            Consagración de los niños al Sagrado Corazón de Jesús (Granada, 1934), 4ª edición.

            De autógrafo Tractatus inediti Card. Ioannis de Luego “De Anima” (Madrid, 1936).

El corazón de Jesús en el Evangelio o ideas ascéticas de la devoción al Sagrado Corazón a la luz del Evangelio (Granada, 1937).

Al guerrero (Granada, 1937).

Al obrero (Granada, 1942)

            La consagración personal (Granada, 1951)

            La devoción al Sagrado Corazón de Jesús. Importancia. Consagración personal (Granada, 1941).

            Sugestiones y exámenes prácticos sobre el culto del Sagrado Corazón (Granada, 1945).

            El Corazón de Jesús en el Evangelio. Meditacioners (Granada, 1958), 2ª edición.

            Cartas de Santa Margarita María preparadas para la meditación (Granada, 1958).

            La Iglesia Patrística y la Parusía (Buenos Aires, 1962).

            Destellos bíblicos (Buenos Aires, 1962); diez volúmenes.

            El Corazón de Jesús a la familia (Granada, 1970)

Bibliografía

            VARGAS RUBIO, R.: El Padre Alcañiz. Gran apóstol del Corazón de Jesús en el siglo XX. Jaén, 2007.