ALMAGRO GRACIA, Aurelio

Zaragoza, 10-10-1881 / México 01-02-1973

Médico, licenciado por la Universidad de Zaragoza, nada más concluir los estudios se trasladó a Cuenca, donde ejerció la profesión en El Campichuelo con sede en Sotos, además de ser titular de la Casa de Beneficencia y de la Sociedad Obrera «La Aurora«, presidiendo el colegio profesional. Su familia estaba muy arraigada en la aldea de Embid. Atraído por la política desde muy joven, lo hizo inicialmente a través del carlismo, siguiendo así la ideología practicada por su padre, pero pronto cambió la inclinación para asumir las ideas del reformismo de Alejandro Lerroux para finalmente recalar en el socialismo. Formó parte del grupo responsable de reorganizar la Agrupación Socialista de Cuenca en 1918, de la que fue presidente durante diez años y colaboró asiduamente en los periódicos El Progreso Conquense, La Lucha y Electra,además de algunas publicaciones en la revista profesional Cuenca sanitaria. Paralelamente, ingresó en la masonería con el nombre simbólico de “Moncayo”, dentro de la logia Ibérica núm. 7, de Madrid, aunque parece que en este grupo no llegó a alcanzar un papel relevante. Gobernador interino de Cuenca al proclamarse la República, fue elegido diputado por Cuenca en 1931 y por Granada en 1936, en ambos casos a través del PSOE, que le presentó en la provincia andaluza como consecuencia de las necesidades de la conjunción republicana, que en la repetición electoral de ese año dio preferencia a Álvarez-Mendizábal en Cuenca. Antes, en 1934, formó parte del comité revolucionario de Cuenca durante los sucesos de octubre. Al término de la guerra civil, tras una breve estancia en los campos de internamiento en Francia, emigró a México a bordo del barco “Sinaia” y presidió el grupo parlamentario socialista en el exilio, mientras ejercía la medicina en la Benéfica Hispana y participaba en la fundación del Hospital Español. El 11 de julio de 1997 su familia entregó a la Fundación Pablo Iglesias la documentación que aún conservaba en su poder.

Caricatura de Ricardo Pérez Compans en El Día de Cuenca