Propietario de una fábrica de tejidos en Cuenca, con la que quiso recuperar la antigua tradición de los telares conquenses. La estableció en 1790 y prolongó su actividad durante casi un siglo. Cuenta Torres Mena que en un principio se hacían a mano todas las operaciones fabriles, que había distribuido en diferentes centros de producción a los que llamaba escuelas y que estaban localizados en Valparaíso de Abajo, Pineda, Torrejoncillo del Rey, Palomares del Campo, Alcázar del Rey, La Frontera, Portalrubio y algunos otros. En la fábrica montó ocho telares para diversas clases de paños, a los que añadió en 1806 otros dos para barraganes y otras dos para alfombras, especialidad en las que alcanzó un gran prestigio.

Referencias:  José Torres Mena, Noticias Conquenses. Madrid, 1878; Imprenta Revista de Legislación, p. 385.